viernes, 15 de julio de 2016

Las monedas de la Isla Rossel (Papúa-Nueva Guinea).

Las monedas de la Isla Rossel (Papúa-Nueva Guinea). Artículo publicado en: Eco Filatélico y Numismático 66(1183) (Marzo, 2010): pp. 42-43.

Miguel Ibáñez Artica.

            Dos años después de que el antropólogo Bronislaw Malinowski publicara su impactante obra “Los argonautas del Pacífico” en 1922 (1), Wallace Armstrong dio a conocer una curiosa forma de economía monetaria en la isla de Rossel, situada muy cerca de la zona estudiada por Malinowski. Mientras en las Trobriand los “souvala” y “mwali” (las principales monedas-concha) se utilizaban como monedas ceremoniales, en Rossel existía un sofisticado y complejo sistema monetario, con dos familias completamente diferentes de monedas. En primer lugar las “ndap”, formadas por fragmentos redondeados y pulidos de conchas del género Spondylus, con una coloración rojiza, naranja o amarillenta, y que presentan un pequeño orificio cerca del extremo más agudo (Figura 1 parte superior). Dentro de esta familia de monedas existían 22 categorías diferentes, y cada una de las monedas de los ocho tipos más valiosos, fabricadas por los dioses según la mitología local, tenía su propio nombre individual y era reconocida por todos.


Figura 1.- En la parte superior dos valiosas monedas “ndap”, en la inferior una “ke”.

            El segundo tipo monetario, de aspecto muy diferente era el “ke” del que existían 16 tipos  diferentes, dependiendo su importancia en la clasificación del tamaño de las piezas que integran la moneda (entre 8 y 40 mm.). La moneda está formada por diez pequeños discos elaborados con la concha del molusco de la especie Chama pacifica unidos en hilera (Figura2), y  tienen menos valor que las “ndap”.  


Figura 2.- Diferentes partes de la moneda “ke” (según Liep, 2007, p. 195)

            La publicación de los descubrimientos de Armstrong en revistas de antropología y economía (2), junto con los espectaculares hallazgos de Malinowski, contribuyeron en buena medida a cambiar la percepción que tenían los antropólogos occidentales, y la mayoría de la gente, acerca de los “pueblos primitivos”, poseedores de una estructura social, y en este caso económica, mucho más compleja de lo que hasta la fecha se consideraba.

            Ha pasado casi un siglo desde que se realizaron estos hallazgos, y podríamos suponer que estos originales sistemas monetarios han desaparecido hace tiempo, engullidos por la moneda económica occidental, que surgida en Asia Menor en el siglo VIII a.C. se ha expandido a todos los rincones del Planeta, fagocitando otros tipos de monedas locales de uso más restringido. Pero todavía en la actualidad encontramos muchas de estas monedas tradicionales vivas en algunos lugares (Figura 3).


Figura 3.-  Billete de 5 kinas donde aparecen algunas monedas tradicionales en uso:
            a.- Moka-Kina de los montes de Highland.
            b.- Talipún de la zona del río Sepik.
            c.- Manum de Nueva Irlanda.
d.- Ke de la isla de Rossel, dibujado a partir del ejemplar depositado por el Dr. Liep en el Museo Nacional de Port Moresby.

En septiembre del pasado año (2009), la universidad de Aarhus (Dinamarca) editó una importante publicación (Figura 3), que recoge el fruto de más de tres décadas de trabajo del profesor John Liep en la isla Rossel, y con mínimas variaciones con lo observado hace un siglo por Armstrong, este original sistema monetario sigue todavía vivo y vigente (3).


Figura 4.- Portada del libro del Dr. Liep sobre las monedas de la Isla Rossel, mostrando la entrega de valiosas monedas “ndap”, collares de conchas y hachas de piedra en una ceremonia funeraria.

            En la actualidad existen 20 tipos de “ndap” y 14 de “ke”, los cuatro niveles superiores han dejado de ser utilizados como moneda pasando a la categoría de objetos valiosos intransferibles. La explicación a este fenómeno es que dichas monedas se utilizaban exclusivamente para resarcir a los parientes de aquellas personas que habían sido objeto de canibalismo, al eliminarse esta ancestral costumbre, el uso de dichas monedas ha perdido su sentido. Aun así cada una de ellas tiene su propio nombre y siguen siendo objetos de extraordinario valor que se heredan de padres a hijos. Las cinco categorías siguientes de monedas ndap se utilizan excepcionalmente en pagos muy importantes, mientras las once restantes circulan habitualmente en intercambios rituales o comerciales (Figura 4).  La clasificación de las monedas “ke” es complementaria a la anterior, y salvo las del primer tipo, correspondiente a ejemplares muy antiguos, utilizados también en su día como resarcimiento a los familiares de víctimas de canibalismo, las restantes son utilizados en pagos e intercambios cotidianos.

            No solo se utilizan estos dos tipos de monedas concha, también presentan la misma finalidad otros objetos como las hachas de piedra, espátulas ceremoniales y collares de conchas, estos collares son exportados a las vecinas islas Trobriand donde se convierten en monedas del Kula. Con la parte más gruesa de la concha de la especie Chama pacifica, se fabrican los discos que componen el soulava (una de las monedas del Kula de las islas Trobriand), mientras que las partes más delgadas de la concha sirven para la fabricación de la moneda local, el “ke”.


Figura 5.- Transacción  en una fiesta del cerdo donde se utilizan monedas ndap y ke.

            Actualmente (Figura 5) se utilizan en la isla Rossel cuatro tipos monetarios, las monedas ndap, las ke, los útiles como hachas, espátulas y collares, y el dinero normal (billetes de banco en kinas, moneda oficial de Papua-Nueva Guinea). Los cuatro tipos de intercambios donde se utilizan dichas monedas son las dotes matrimoniales (dinero de la novia), las fiestas del cerdo, la adquisición de casas o canoas y los intercambios mortuorios en funerales. Mientras las monedas ndap circulan en todos estos ámbitos de intercambio, las ke están ausentes en los funerales, y los billetes de moneda moderna son utilizados (muchas veces junto con los otros tipos de moneda) en las fiestas del cerdo y en la adquisición de bienes.

Notas:

(1)  Donde se describe la compleja ceremonia del “anillo del Kula” de las islas Trobriand (Papúa-Nueva Guinea), en la que se intercambian “mwali” y “soulava”, valiosas “monedas-concha”.

(2)  Armstrong, W.E., 1924. Shel’-Money from Rossel Island, Papua. MAN 24: pp. 161-162; Armstrong, W.E., 1924. Rossel Island Money: A Unique Monetary System. The Economic Journal 34(135): pp. 423-429.

(3) Liep, J., 2009. A Papuan Plutocracy. Ranked Exchange on Rossel Island. Aarhus Univ. Press Dinamarca: 376 pp.  





viernes, 1 de julio de 2016

Dos casos de depredación entre animales marinos en las antiguas acuñaciones griegas (Cumas y Accragas).

Dos casos de depredación entre animales marinos en las antiguas acuñaciones griegas (Cumas y Acragas). Artículo publicado en “Abissalia” 1 (1987, ISSN 0214-0268) pp. 21-22.

Miguel Ibáñez Artica.

            Las representaciones faunísticas son particularmente abundantes en la iconografía griega, donde alcanzan una gran perfección; y es en las primitivas acuñaciones donde aparecen gran cantidad de animales, tanto imaginarios (tritones, serpientes marinas…) como reales, y dentro de estas últimos, tanto marinos como terrestres.

            Con respecto a la fauna marina que aparece en las primitivas monedas griegas son varios los animales que encontramos representados (mejillón, concha de peregrino, murícidos, sepias, pulpos, camarones, cangrejos y peces) (Ibáñez, 1982 (1987)).

            Aunque podemos encontrar varias especies animales representadas en una misma moneda, es más raro encontrarlos relacionados entre sí, y esto es lo que ocurre en las dos monedas que presentamos.

            La primera es una estátera eubéa de plata de 8,4 gramos de peso (Robinson, 1971) en cuyo anverso figura la diosa Atenea con casco corintio y la leyenda KUN AION, y en el reverso un cangrejo sujetando a un mejillón en actitud de comérselo (Figura 1).


Figura 1.- Estátera de Cumas, c. 480 a.C.

            La ciudad de Cumas, situada en la costa de Campania en la Italia Meridional (Magna Grecia) fue una primitiva factoría griega desde el siglo X a.C., y es donde según la tradición, llegó Eneas tras el desastre de la guerra de Troya.

            Es sin embargo en el siglo octavo antes de nuestra Era cuando, colonizada por los Eubeos, alcanza su máxima prosperidad.

            Las primeras monedas fueron acuñadas hacia el año 490 a.C. por Aristodemo Malacos (“el afeminado”) quien apoyó a los romanos contra los etruscos que querían restablecer la dinastía de los Tarquinos en Roma. Hacia el 458 Aristodemo es depuesto por la Aristocracia de la ciudad que apoya al tirano Hierón de Siracusa en su lucha contra los Etruscos.

            La victoria en el 474 de Hierón, libra a los habitantes de Cumas de la amenaza etrusca, pero otros pueblos vecinos se ciernen sobre la ciudad que finalmente es capturada por los Samnitas en el año 423 a.C.

            En las monedas acuñadas por esta ciudad figura en el anverso una cara femenina, identificada con la ninfa Cumas (Babelon, 1907) o con Sibila (Poole, 1873), o bien con la diosa Atenea con casco corintio (más raramente el casco sólo o una cabeza de león).

            En el reverso figura un mejillón (Mytilus galloprovincialis), a veces acompañado de otras representaciones (ratón, arco, punta de lanza, grano de trigo, delfines, serpiente marina…).

            El mejillón, animal que caracteriza las monedas de Cumas, fue sin duda una importante fuente económica en la ciudad y debía de ser importante la producción de este molusco (¿tal vez cultivado?) en los lagos salinos próximos a la ciudad (Fusaro, Licola, Lucrina).

            La moneda aquí representada fue acuñada hacia el año 480 a.C. y resulta extraña, ya que normalmente la figura que acompaña al mejillón es de menor tamaño y en este caso se trata de una representación donde ambos animales están relacionados (el cangrejo sujeta al mejillón con sus pinzas. ¿Pudo deberse esta escena a una plaga de cangrejos que asolaron los ricos bancos de mejillón? ¿Se trata de alguna alusión indirecta a los turbulentos acontecimientos que se produjeron durante la deposición de Aristodemo o la amenaza que vivió la ciudad proveniente de sus vecinos Etruscos?

            Tal vez nunca sabremos la respuesta, pero sí parece claro que tal representación, aislada en el contexto numismático, no debió ser casual.


            La segunda moneda representada es un Hemilitron de bronce de 22 gramos de peso acuñado en la ciudad siciliana de Acragas (Agrigento) entre el 425 y el 406 a.V.

            La ciudad de Acragas en el sur de la Isla fue colonizada hacia el 528 a.C. por los Dorios venidos de Gela y Rodas que seguían las rutas “minóicas” tradicionales (Bayet, 1930).

            Falaris, cruel tirano de Acragas (565-549) embelleció la ciudad construyendo un famoso templo dedicado a Zeus; precisamente el águila que figura en los anversos de las monedas acuñadas en Acragas representa al dios Zeus Atabyros de los Rodios. Este águila a veces lleva una liebre entre sus garras (la liebre aparece en las monedas de la vecina ciudad de Messana) o como en el presente caso un atún (símbolo utilizado frecuentemente por los fenicios, precisamente es abundante en las ciudades ibéricas de Gades, Sexi y Abdera).

            El cangrejo hace alusión al nombre de la ciudad, y si bien parece corresponder a  la especie fluvial Pomaton fluviatile (Delorme & Roux, 1987), abundante en los ríos Hypsas (Drago) y Acragas (San Biasio) que se unen cerca de la ciudad, posteriormente la figura degenera y en unos casos se parece al cangrejo de mar Pachygrapsus marmoratus, mientras en otros adopta formas difíciles de identificar.

            La moneda (Figura 2) presenta el reverso rodeado de seis glóbulos o puntos (indicadores del valor de seis uncias), un caracol marino y un pulpo, encima el cangrejo que lleva en su pinza izquierda un “gusano” (posiblemente poliqueto) interpretado por varios autores como una “angula” (Poole, 1876, Sear, 1978).



Figura 2.- Hemilitron de Akragas, 425-406 a.C.

            En este caso no cabe pensar en una interpretación oculta y la representación que se nos ofrece es una simple y sencilla depredación.

            Hemos visto como en las acuñaciones griegas, y más concretamente del sur de Italia y Sicilia, encontramos casos excepcionales donde se ven acciones depredadoras en animales marinos (cangrejo-mejillón en Cumas y cangrejo-poliqueto en Acragas). Estas representaciones de depredación son frecuentes en animales terrestres (león-toro, águila-liebre…) y presentan un contenido simbólico. En el presente caso la figura que aparece en la moneda de Cumas podría tener un cierto significado.

Bibliografía:

Babelon, E. (1907). Traité des Monnaies Grecques et Romaines (2e part, T.1): 1670 pp.
Bayet, J. (1930). La Sicile Greque. Les Belles Letres: 56 pp.
Delorme, J. & Ch. Roux (1987). Guide illustré de la Faune aquatique dans l’art Grec. A.P.D.C.A.: 175 pp.
Ibáñez, M. (1982(1987)). La fauna marina en las antiguas acuñaciones griegas. III Simposio Ibérico de Estudios del Bentos Marino, Pontevedra 4-8 octubre 1982: pp. 43-50.
Poole, R.S. (1873). A catalogue of the Greek coins in the British Museum: Italy: 432 pp.
Poole, R.S. (1876). Ibid: Sicily: 292 pp.
Robinson, E.S.G. (1971). A catalogue of the Calouste Gulbenkian collection of Greek Coins. F.C. Gulbenkian: 136 pp.

Sear, D.R. (1978). Greek Coins and their values (V.I: Europe). R. Stockwell Ltd.: 317 pp.