El tesoro de la
calle de la Merced de Pamplona. Artículo publicado en: Eco Filatélico y Numismático 74(1278)
(Noviembre 2018): pp. 51-53.
Miguel Ibáñez Artica
El 13 de marzo de 1940, los
obreros que realizaban reformas en el número 27 de la calle de la Merced, en la
parte vieja de Pamplona, encontraron un tesoro dentro de una bolsita de tejido
mudéjar, integrado por un anillo de oro con una piedra azulada y 117 monedas
medievales de oro, con rarísimas piezas aquitanas, francesas, italianas y
castellanas del siglo XIV. Este conjunto monetario fue incorporado en 1941 a
los fondos del monetario del Museo Arqueológico Nacional de Madrid donde se
conserva (Figura 1).
Figura 1.- Tesoro de la
calle de la Merced (Pamplona) y ubicación del lugar donde fue hallado.
El profesor Felipe Mateu y
Llopis publicó en 1943 este importante descubrimiento (“hallazgo LXXII”) y en
la exposición que tuvo lugar en el Museo de Navarra el año 2001 se pudo ver una
selección de 18 monedas procedentes de este hallazgo (Figura 2). La composición del tesoro de las 117 monedas de oro es
la siguiente:
Aragón (91 monedas):
Pedro
IV (1335-1387)
Florines (Figs. 2a,b).
Barcelona 37
Valencia 14
Perpiñan 13
Valencia 1
Zaragoza 1
Fustros 5
Medios
Florines (Figs. 2c,d).
Barcelona
10
Valencia 6
Fustros 3
Juan
I (1387-1395)
Florín
o medio florín de Valencia 1
Castilla (6 monedas):
Pedro
I (1387-1395)
Dobla
del busto de Sevilla (Fig. 2e). 4
Dobla
del busto de La Coruña 1
Dobla
o cstellano de Sevilla (Fig. 2f). 1
Italia (11 monedas):
Ducados
venecianos (1339-1367) (Figs. 2g,h) 8
Ducado
romano (1350-1439) 1
Florín
florentino (Fisg. 2i,j). 2
Francia (7 monedas):
Real
de oro de Carlos IV (1322-1328) (Fig. 2k). 1
Id.
De Felipe VI (1328-1350) (Fig. 2l). 1
Franco
a pie de Carlos V (1364-1380) (Figs. 2m,n). 4
Escudo
de oro de Carlos VI (1380-1422) (Fig. 2o). 1
Inglaterra-Aquitania (2 monedas):
Medio
Hardi de oro de Burdeos de Ricardo II
(1377-1399)
(Fig. 2p). 2
Figura
2.- Selección de piezas del
tesoro:
(a ) y (b): Florines de
Pedro IV de Aragón. (c ) y (d): Medios florines de Pedro IV. (e): Dobla de busto de Pedro I. ( f ): Castellano
de Pedro I. (g ) e (h): Ducados venecianos de Andrea Dándolo y Andrea
Contarini. ( i ) y (j): Florines de
Florencia. (k): Real de oro de Carlos IV de Francia. (l): Real de oro de Felipe VI de Francia. (m ) y (n ): Francos de oro a pie de Carlos V
de Francia. (o): Escudo de Carlos VI de Francia. (p ) y (q ): Medios ardites de
oro aquitanos de Ricardo II de Inglaterra.
El peso
total de las monedas es de 375 gramos, y
los florines aragoneses suponen casi las tres cuartas partes del peso
(71,4%) y del número total (77,78%). El segundo lugar lo ocupa la moneda
italiana con un 11,3 % en peso y un 9,4% del número de monedas, mientras que
las monedas francesas y castellanas están representadas por el mismo porcentaje
en peso (8,1%). Finalmente, la moneda anglo-aquitana supone tan solo el 1,12%
del peso total del tesoro.
Figura 3.- Tipos monetarios del tesoro y ubicación del número 27
de la calle de la Merced.
a: florines y medios florines; b: dobla de busto; c:
castellano; d: ducado; e: real; f: franco a pie; g: escudo; h: medio ardite.
Este
conjunto monetario fue ocultado alrededor del año 1400, durante el reinado de
Carlos III “el Noble” de Navarra, y nos permite conocer las monedas de oro que
circulaban en esa época.
La
gran cantidad de monedas de oro de diferentes tipos que circulaban juntas y
mezcladas (Figura 3) hacía necesario
que banqueros y comerciantes dispusieran de “libros de cambio” donde
minuciosamente se detallaba el valor de las diferentes monedas en libras,
sueldos y dineros, surgiendo la figura del “cambista” (habitualmente vinculado
al banquero o prestamista). Con mucha frecuencia estas profesiones las ejercían
judíos, y en menor medida “lombardos”, tal como se denominaba a los banqueros
italianos. Podemos suponer que este tesoro pertenecería a alguno de estos
personajes, que por razones desconocidas, ocultó el tesoro y posteriormente no
pudo recuperarlo, permaneciendo escondido durante más de medio milenio hasta su
descubrimiento accidental.
Con respecto al origen de estos
tipos monetarios foráneos, podríamos diferenciar entre las monedas cuya
acuñación se debe a razones políticas (francesas y aquitanas cuyo origen está
en el conflicto de la Guerra de los Cien Años) y las que responden a razones
económicas (la moneda italiana).
Figura 4.-
Comparación de la circulación monetaria de piezas de oro en Navarra en 1386 con
los datos del tesoro de la calle de la Merced (Ibáñez, 1998).
El mejor muestreo de la moneda fuerte foránea que
circuló en Navarra en esta época, lo encontramos en las 7.625 piezas de oro
recaudadas en 1386 para pagar la dote de la infanta Juana, hija del Rey (Figura 4). En esta lista que recoge 20
tipos distintos de monedas (Ubieto, 1967) predomina el florín de Aragón, con un
64.3% del número de la moneda recaudada y un 55.5% del valor total de la moneda
de oro, seguido por la moneda francesa (especialmente francos) que supone el
32.44% del número de monedas y el 40.7% del valor del oro recaudado. Siguen en
importancia la moneda musulmana con un 1.3 y un 2% respectivamente y con menor
representación la moneda italiana, la moneda de oro castellana, la corona de
oro navarra, la moneda de oro anglo-aquitana y los florines de Hungría.
Si
comparamos estos datos con los del tesoro de la calle de la Merced (Figura 4), observamos como hacia 1400, el
florín de Aragón seguía circulando en Navarra como la principal moneda fuerte,
mientras que la moneda de oro francesa pierde peso en favor de la castellana e
italiana, proceso que se aprecia durante el reinado de Carlos III, y que
corresponde por una parte a la política de acercamiento a los reinos
peninsulares del monarca navarro, y por otra, a la intensificación de las
relaciones comerciales con Italia.
Aparte
del valor intrínseco de las propias monedas, lo más valioso de estos conjuntos
monetarios es la información que nos proporcionan sobre la realidad cotidiana
en épocas pasadas, que junto con la documentación conservada, nos permite
reconstruir la historia económica y social.
Bibliografía:
Ibáñez, M., 1998. Monedas
foráneas en época Medieval y Moderna. Actas X Congr. Nac. Numismática. Albacete 28-31 Octubre 1998. Madrid,
Museo Casa de la Moneda : 129-171.
-Circulación de moneda
foránea, falsificaciones y exportación fraudulenta. En: La moneda en Navarra.
Ed. Gobierno de Navarra. Pamplona: 241-256.
Mateu
y Llopis, F. 1943. Hallazgos monetarios (II). Ampurias 5: pp. 221-238.
Ubieto,
A., 1967. Monedas que circulaban en Navarra en el siglo XIV y sus valores. Numisma
17(84/89), pp. 59-66.