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domingo, 1 de enero de 2023

Las enigmáticas monedas de Ramiro II “el Monje”, rey de Aragón (1134-1137-1157).

 

Las enigmáticas monedas de Ramiro II “el Monje”, rey de Aragón (1134-1137-1157).. Artículo publicado en: Eco Filatélico y Numismático 78 (1321) (Octubre, 2022): pp. 45-47.

 

 

 

Miguel Ibáñez Artica

 

Las enigmáticas monedas de Ramiro II “el Monje”, rey de Aragón (1134-1137-1157).

 

            El rey de Aragón Ramiro II, apodado “el Monje”, llegó al trono en unas particulares circunstancias. Era el cuarto hijo de Sancho Ramírez, el tercero de su segunda mujer Felicia de Roucy, por tanto hermano de Alfonso I “el Batallador” y hermanastro de Pedro I, ambos reyes de Pamplona y Aragón. 

            Cuando el 7 de septiembre de 1134 falleció Alfonso I como resultado de las heridas recibidas en julio durante el asedio de Fraga, ante la ausencia de descendencia, dejó en su testamento, los reinos de Pamplona y Aragón a las órdenes militares de los templarios, hospitalarios y del Santo Sepulcro.

            Ni los nobles pamploneses, ni los aragoneses, respetaron dicho testamento, y mientras los primeros elegían como nuevo rey de Navarra a García Ramírez, noble descendiente por línea bastarda de García III de Pamplona y nieto del Cid Campeador, los aragoneses proclamaron como nuevo monarca a Ramiro, hermano del fallecido Alfonso, que en esas fechas ocupaba el cargo de obispo de Roda-Barbastro, siendo coronado en Zaragoza el 29 de septiembre de 1134 (Fig. 1).

Figura 1.- Retrato imaginario de Ramiro II “el Monje” (Museo del Prado).

 

            El objetivo del nuevo monarca no era el de reinar, sino el de garantizar la sucesión del reino, para lo cual contrajo matrimonio el 13 de noviembre de 1135 con Inés de Poitou, una noble viuda francesa, y el 11 de agosto del año siguiente nacía la heredera, Petronila. A finales de año el matrimonio se separó, e Inés ingresó en un monasterio, y  en agosto de 1137 se produjo en Barbastro el compromiso matrimonial de Petronila (con un año de edad) con el conde de Barcelona Ramón Berenguer IV.

            Una vez conseguido el objetivo de asegurar la sucesión del reino, el 13 de noviembre de 1137, Ramiro transfirió a su futuro yerno el reino, pero no la dignidad real, de forma que desde ese momento Ramón Berenguer IV firmó sus documentos como Conde de Barcelona y Príncipe de Aragón, mientras que la reina era Petronila (Fig. 2), y en ese mismo año el monarca aragonés se reincorporó de nuevo a la vida eclesiástica. Así pues, el reinado efectivo de Ramiro II “el Monje”, tuvo una corta duración, desde septiembre de 1134 hasta el mismo mes del año 1137, cuando cedió el reino al conde de Barcelona.

 

Figura 2.- Retratos imaginarios de Patronila y Ramón Berenguer IV (Museo del Prado). La boda de Petronila y Ramón Berenguer se celebró en Lérida en agosto del año 1150, trece años después de acordarse el matrimonio.

 

            Sin embargo, sabemos que en ese período de tiempo acuñó moneda, ya que existe un documentos fechado en noviembre de 1135, donde el monarca realiza una serie de donaciones a los monasterios de San Juan de la Peña y Santa María de Iguácel como compensación por los bienes de oro y plata que había tomado para hacer moneda(1).  

            Según esto, Ramiro II hizo acuñar moneda probablemente en los inicios de 1135, y a pesar de que al comienzo de su mandato tuvo que adoptar medidas drásticas para afianzar su gobierno cuestionado por algunos nobles (como se narra en la leyenda de la “campana” de Huesca, relatada en la Crónica de San Juan de la Peña), no tuvo nunca la intención de mantenerse en el poder más allá de garantizar la continuidad sucesoria del reino.

            Estas monedas, que deberían llevar el nombre de Ramiro, no han aparecido hasta el momento. Sin embargo, al revisar las emisiones realizadas por sus antecesores, sus hermanos Alfonso I y Pedro I, así como las de su padre Sancho Ramírez, podemos observar un detalle curioso.

 

Figura 3.- Emisiones a nombre de Sancho (a) y Alfonso (b) con leyenda “ARAGONENSI/S” y cruz patada en el reverso (el primer ejemplar del Museo de Navarra, MN 4575).

 

            Entre las abundantísimas emisiones realizadas por Sancho Ramírez, rey de Pamplona y Aragón entre 1076 y 1094, encontramos una muy rara (tanto en dineros como en óbolos) donde aparece un tipo de busto muy característico, con tres líneas de puntitos en el cuello, marcando el inicio de una cota de mallas, y en el reverso una gran cruz patada sobre pedestal en vez del característico “árbol crucífero” del resto de las masivas emisiones realizadas por este monarca. Otra singularidad se da en la leyenda del reverso donde aparece “ARAGONENSI” en los dineros y “ARAGONENSIS” en los óbolos (Fig. 3a, a’). Esta moneda ya fue descrita por San Pío y Ansón (1925) y posteriormente por Beltrán (1951) autores que la atribuyen a Sancho Ramírez.

            Este tipo de monedas con cruz patada sobre pedestal y leyenda “Aragonensis” es relativamente abundante en tiempos de Alfonso I “el Batallador” unos años más tarde (1104-1134) (Fig. 3b, b’), habiéndose interpretado como las emisiones navarras de dicho monarca (Crusafont & Balaguer, 1986), o como monedas de cecas itinerantes que acompañaban al rey en sus campañas militares contra los musulmanes (Ibáñez, 2016). Sea cual sea la explicación, lo cierto es que no se fabricaron en tiempos de Pedro I (1094-1104), lo que resulta bastante extraño.

            En la Figura 4 hemos representado los diferentes tipos de bustos que aparecen en los monarcas de la dinastía aragonesa (Sancho V Ramírez, Pedro I y Alfonso I), así como en las emisiones navarras de García IV “el Restaurador” y Alfonso VII de Castilla y León,

            Podemos definir tres grandes grupos, en primer lugar la mayor parte de los bustos de Sancho Ramírez y Pedro I (Figs. 4Aa-n y 4Ba-d), un segundo grupo iniciado por Pedro I, con un busto mirando a la izquierda con un característico moño (Fig. 4Be), que se prolonga en algunas emisiones de Alfonso I (Figs. 4Ca-b), y en tercer lugar una serie de bustos de diferente estilo que incluye las emisiones de Alfonso I con leyenda “aragonensis” (Figs. 4Cc-f) y se prolonga en las emisiones navarras de García IV (Figs. 4Da-g) y en la de Alfonso VII de Castilla-León con leyenda “imperator” (Fig. 4E). Dentro de estas emisiones tardías podríamos incluir la moneda de Sancho Ramírez con leyenda “aragonensis” (Fig. 3a).

 

Figura 4.- A: Tipos de bustos en las monedas de Sancho Ramírez; a-b: Tipo S-I con leyenda “ARAGON”; c-d: Tipo S-I con leyenda “IACCA”; e-g: Tipo S-II; h: Tipo S-III; i-k: Tipo S-IV; l-m: Tipo S-V con leyenda “ARAGON”; n: Tipo S-V con leyenda “MONSON”.

B: Tipos de bustos en las monedas de Pedro I; a: Tipo P-I con leyenda “ARAGON”; b: Tipo P-I con leyenda “MONSON”; c: Tipo P-I con leyenda de anverso “PETRVSSANCIVSREX”; d: Tipo P-II; e: Tipo P-III.

C: Tipos de bustos en las monedas de Alfonso I; a-b: Tipo A-I; c-f: Tipo A-II.

D: Tipos de bustos en las moneas de García IV de Navarra; a: Tipo G-I.A; b: Tipo G-IV.A; c: Tipo G-II.A; d: Tipo G-IV.B; e: Tipo G-II.B; f: Tipo G-III; g: Tipo G-V.

E: Busto de Alfonso VII de Castilla/León con leyenda ”IMPERATOR”

F: Bustos de Alfonso II de Aragón (1164-1196).

 

            Dadas las peculiares características del “forzado” reinado de Ramiro II, que el mismo monarca se encarga de explicar en noviembre de 1137 cuando transfiere el reino: “Transcurridos escasos días (desde la muerte de Alfonso I), en este punto felizmente alzado, como consecuencia de la muerte de este varón, no por ambición de honores o deseo de enaltecimiento, sino únicamente por la necesidad del pueblo sediento y por la tranquilidad de la Iglesia, con plena voluntad y buen ánimo, asumí la potestad regia y la culminación de la dignidad y sucedí a mi hermano. Además tomé mujer, no por la lujuria de la carne sino por la restauración de la sangre (real) y de la estirpe”, y teniendo en cuenta que el principal motivo de que el busto del monarca figure en las monedas desde las primeras emisiones de Sancho Ramírez, es precisamente el de reafirmar la autoridad real de quien ostenta el poder, no resultaría extraño que Ramiro evitara colocar en sus monedas su nombre, y en vez de ello, utilizara los motivos que había empleado su hermano Alfonso (monedas con cruz patada sobre pedestal con leyenda “aragonensis”), pero colocando el nombre de su padre Sancho Ramírez, de forma que las raras monedas que reúnen estas características pertenecerían en realidad al nuevo monarca aragonés Ramiro II “el Monje”, y no a Sancho, tal como se había considerado hasta la fecha.

 

 

Figura 5.- Probables emisiones de Ramiro II de Aragón; a: Dinero con leyenda “SANCIVS REX” y “ARAGONENSI”; b: variante con leyenda “ANCIVS REX”; c: óbolo con leyenda “ARAGONENSIS”.

            El tipo de busto instaurado por Alfonso I en las monedas con leyenda “aragonensis”, es el que posteriormente se adoptó en las monedas acuñadas por García IV de Navarra, y Alfonso VII en la moneda con leyenda “imperator”, así como en las efímeras emisiones de Ramiro II. Años más tarde, su nieto Alfonso II de Aragón (1164-1196), recupera para sus monedas el tipo de “busto con moño” (Fig. 4F) de sus antepasados Pedro y Alfonso (Figs. 4Be y 4Ca-b), al que añade una doble cinta a modo de coleta.

            La numismática no es precisamente una “ciencia exacta”, y menos en períodos antiguos y medievales, y la aparición de una nueva moneda o leyenda monetal puede dar al traste con las atribuciones convencionales. Por el momento, y en base a criterios morfológicos e historiográficos podemos plantear como la hipótesis más probable, la atribución a Ramiro II (emisión del año 1135), de las raras monedas con leyendas “SANCIVS” en anverso y “ARAGONENSI” o “ARAGONENSIS” en reverso.

 

Notas:

(1)Et has villas supradictas offero Deo et Sancto Iohanni et Sancte Marie de Ibozar et monachis ibidem servientibus, et ut habeant et possideant illas perpetualiter pro illo calice de lapide precioso et per uno urceo similiter que traxit de Sancto Iohanne et per illam tabulam de argento et de superaurata quem traxi de Sancta Maria de Ibozar per meam monetam facere de Iacha. Et fuit illo argento pesato quadraginta marcos et media onza de fina plata (Ubieto, 1988: 99).

 

Bibliografía:

 

Beltrán, P., 1951. Los dineros jaqueses, su evolución y desaparición. Caesaraugusta 1: pp. 51-112.

Crusafont, M. & A.M. Balaguer, 1986. La numismática navarro-aragonesa alto medieval. Nuevas hipótesis. Gaceta Numismática 81: pp. 35-66.

Ibáñez, M., 2016. Origen del “árbol crucífero” en las primeras emisiones monetarias de los reinos de Aragón y Pamplona. Numisma 260(66): pp. 91-104. 

- 2021. Moneda medieval de Navarra. Manual de Numismática.  Colección Miscelánea Numismática n. 2 (2021): 272 pp.

- 2022. Tipos monetarios de Sancho V Ramírez y Pedro I de Aragón y Pamplona: su representación en museos y tesoros. Gaceta Numismática 203: pp. 57- 71.

San Pío y Ansón, A., 1925. Algunas consideraciones relativas a la moneda labrada en Aragón. Universidad Literaria de Zaragoza: 86 pp.

Ubieto, A., 1951. Colección diplomática de Pedro I de Aragón y Navarra. CSIC Escuela de Estudios Medievales XIX: 511 pp.

 

 

 

 

 

 

 

 











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